Ricardo llega a Oaxaca, México, listo para comenzar sus vacaciones en este hermoso lugar lleno de cultura y tradiciones. Es su primera vez visitando esta ciudad. Después de un largo vuelo, finalmente llega al hotel donde se queda durante su estadía.
Al entrar al lobby del hotel, Ricardo recibe la bienvenida de un amable recepcionista que le saluda con una sonrisa y le dice: "¡Bienvenido a nuestro hotel en Oaxaca! ¿Qué tal su viaje?"
Ricardo responde: "¡Gracias! El viaje fue largo pero por fin estoy aquí. Estoy emocionado por conocer esta ciudad."
El recepcionista le pide el nombre y la reserva para verificar sus datos. Luego, le pregunta: "¿Tiene una identificación válida, por favor?"
Ricardo saca su pasaporte y le dice: "Sí claro, aquí está mi pasaporte."
El recepcionista verifica la información y procede a darle más detalles sobre su estancia. "Su habitación es una habitación estándar con una hermosa vista al jardín. El desayuno está incluido en su tarifa y está disponible desde las 7 a.m. hasta las 10 a.m.," le explica.
Ricardo pregunta: "¿Dónde está el restaurante del hotel? ¿Y a qué hora puedo hacer el check-out?"
El recepcionista le dice: "El restaurante se encuentra en la planta baja, justo al lado del área de la piscina. En cuanto al check-out, es a las 12:00."
Ricardo responde: "Perfecto, ¡gracias por la ayuda!"
El recepcionista continúa: "Si necesita alguna asistencia adicional durante su estancia o tiene alguna otra pregunta, no dude en preguntar en la recepción. Estamos aquí para ayudarle."
Ricardo toma su tarjeta de acceso a la habitación y se despide diciendo: "Gracias, muy amable."
El recepcionista le responde: "De nada. Espero que disfrute de su tiempo en Oaxaca y tenga una estancia agradable en nuestro hotel".
Con una sonrisa, Ricardo se dirige a su habitación para descansar después de su largo viaje para estar listo para todas las aventuras que le esperan durante sus vacaciones.
Photo by Alice Kotlyarenko on Unsplash
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